Anterior a la idea del amor,
anterior a la idea de Dios,
anterior a la idea de la idea,
anterior a la idea del color,
alguna abeja contó secretos
al estigma de la flor.
Anterior a la idea del idioma,
anterior a la idea de frontera,
anterior a la idea de la idea,
anterior a la idea de tú y yo:
el barro, el viento,
destello, aliento,
chispa y combustión.
Estamos porque la avispa,
cantamos porque el pistilo,
porque la gracia de un abejorro.
Vivimos porque la miel,
porque el olor del jazmín,
porque el rocío y su ciclo sin fin.
Para quererte hoy,
para abrazarte hoy,
para mirarte,
para escucharte,
y corresponder a tu amor.
Para la muerte voy,
para la vida voy,
tengo mi estrella
y mi semilla
en lo anterior.